Capital 27 - Lochis 0

Definitivamente, tengo todos los problemas.

Ayer por la mañana, me subo al bondi y sacó el reproductor de música. No prende. ¿Qué carajo le pasa, la puta madre?, pienso.
Apreto los dos botones al mismo tiempo para resetar. No funciona.
Apreto otros dos botones porque tal vez me pude haber confundido. Tampoco funciona.

¿Qué le pudo haber pasado si tenía batería y estaba en hold? ¿se me rompió? ¡Si apenas tiene un año! Me habían dicho que tenía poca vida útil (después de habermelo comprado...¬¬), pero no pensé que duraría un año y medio.

Ya empecé a transpirar. Entre el calor, mi brillante idea de ponerme una remera negra y que el Ipod no prendiera, me estaba poniendo sumamente nerviosa.
Decidí tranquilizarme porque empezar a los gritos, a las puteadas y a los golpes no me iba a llevar a nada.
Saqué la Rolling Stone del corriente mes y me puse a leer.

Cuando llegué a la facultad, le comenté el problema a la muchachada. Una de las chicas, que le había pasado el mismo problema, me dijo que vaya a uno de los Macstores. Me metí en una computadora y busqué la dirección.
Genial. Me tengo que tomar el tan odiado (por mí) 152.
Estuve a punto de no ir, porque realmente hacía mucho calor, estaba cansada, fue una semana pesadísima e iba a salir a la noche (léase como dormir un poco).
Terminé yendo porque camino a la parada del 159, había un 152 diciendo: "Subí que te llevo".

Pedí $1,25 y saqué la revista nuevamente. Me tenía que bajar en Santa Fe.
Leí, leí, leí. Saqué la Guía -T, para verificar que no me había pasado. No. Estaba todo en orden. Seguí leyendo, leyendo, leyendo. Levanto la vista y estaba en Santa Fe, pero no al 1100, sino al 4900. "Ahora empezará a bajar", pensé.
Obviamente, no. Subía. Me bajé en Cabildo a las puteadas.
Cruzo la calle y me subo a otro 152 que me lleve a Correo Central, porque ya estaba empacada y no quería saber nada más. El 152 bajaba todo por Santa Fe, así que mientras que leía la Rolling, me dirigía a la MacStore.
Levanto la vista. Y sí...¿qué pudo haber sucedido? Me había pasado. Otra vez bajando a las puteadas. Caminé un par de cuadras, entré al MacStore y me atendieron a los pocos minutos.

¿Cuál era el problema? Se le había acabado la batería.
Feliz de que no fuera nada grave. Caliente de haber viajado como pelotuda por todo Capital. Me tomé un taxi hasta Correo, corrí el bondi y llegué a casa a eso de las 15h, donde me esperaba un plato (ya) frío de comida.

Definitivamente, Capital sigue en guerra conmigo y voy a dar batalla.

¿A ustedes les pasan estas cosas o solo yo me pierdo?